La ansiedad es un trastorno psicológico muy frecuente que se caracteriza por un conjunto de síntomas físicos y psíquicos que da el organismo en una situación determinada.
Para hablar de ansiedad hemos de hablar del miedo. El miedo es una respuesta defensiva del sujeto ante un peligro real, por ejemplo, un perro rabioso, emitiendo una serie de respuestas cuyo objetivo es alejarlo de la situación peligrosa, siendo la huida la acción más adaptativa del sujeto. La ansiedad también es una respuesta defensiva pero, en este caso, no hay un peligro real que la explique.
Los síntomas de la ansiedad son:
– físicos: taquicardia, palpitaciones, opresión en el pecho, falta de aire, temblores, molestias digestivas, nauseas, sensación de mareo e inestabilidad, pudiendo llegar al desmayo
– psíquicos: inquietud, agobio, sensación de amenaza o peligro, ganas de huir, temor a perder el control, a volverse loco, temor a la muerte
Como vemos, muchos de los síntomas de la ansiedad son parecidos a los del miedo, pero el motivo que los produce es desconocido para el sujeto. Entonces el temor se asociará a la situación en la que los síntomas aparecieron. Si estos se dieron, por ejemplo, en un avión, se asociarán a este medio de transporte, si aparecieron en un lugar cerrado como el metro o un ascensor, se asociarán a esa situación, pero hemos de decir que el temor nada tiene que ver con eso.
¿Qué ocurre entonces? Un ataque de ansiedad que se repita en varias ocasiones, puede dar lugar a una fobia, llegando el sujeto a evitar esas situaciones, el avión, los espacios cerrados, para evitar los síntomas.
Pero ¿qué es lo que produce la ansiedad? Lo que realmente produce la respuesta de ansiedad está desplazado sobre las diferentes situaciones que dice temer el sujeto, no siendo realmente esas situaciones a las que el sujeto les tiene miedo sino otras que desconoce o, lo que es lo mismo, son inconscientes para él.
La terapia psicoanalítica permite al sujeto descifrar qué es lo que teme, y no solo eso, sino qué es lo que desea, ya que el temor, o el miedo, es la otra cara del deseo. Es el deseo inconsciente, intolerable para el sujeto, del que quiere huir, desarrollando una fobia para mantenerse alejado de él.
El psicoanálisis es una terapia muy efectiva en el tratamiento de la ansiedad y la fobia, permitiendo al sujeto tolerar sus deseos inconscientes, dejando de ser el miedo una herramienta útil.
Una psicoanalista en Las Palmas.